No des nada por supuesto.
Si tienes duda, aclárala.
Si sospechas, pregunta.
Suponer te hace inventar historias increíbles que sólo enredan tu alma y NO TIENEN FUNDAMENTO.
Honra tus PALABRAS. Lo que sale de tu boca: ERES TÚ.
Si no honras tus palabras, no te estás honrando a ti mismo; si no te honras a ti mismo, no te amas.
Honrar tus palabras es honrarte a ti mismo, es ser COHERENTE con lo que piensas y con lo que haces. Esto te hace auténtico y te hace respetable ante los demás.
Has SIEMPRE lo MEJOR que PUEDAS.
Si siempre haces lo mejor que puedas, nunca podrás recriminarte nada o arrepentirte de nada.
No tomes nada PERSONAL, ni la peor ofensa, ni el peor desaire, ni la más grave herida.